Análisis de la deshidratación en practicantes de Crossfit

Resumen

El entrenamiento de crossfit se suele organizar en ejercicios aeróbicos y anaeróbicos, clasificando sus sesiones como entrenamiento. Para todos los deportistas y practicantes de actividad física, la deshidratación es una dificultad y puede modificar las respuestas fisiológicas y el rendimiento físico, si la pérdida de masa corporal provocada por la deshidratación es del 1% al 3%. Así, teniendo en cuenta los efectos de las pérdidas de agua en la práctica de Crossfit, el objetivo del presente estudio fue analizar el grado de deshidratación en practicantes de esta modalidad. Se realizó un estudio observacional descriptivo transversal con 30 individuos adultos, aplicándose un protocolo de investigación referente a la identificación del practicante, variables socioeconómicas, valoración nutricional antropométrica (perímetro braquial, espesor del pliegue cutáneo tricipital, perímetro muscular del brazo, área muscular del brazo corregido), variables de ejercicio y tasa de deshidratación. Se encontró que el 90% de la muestra ingirió agua durante el entrenamiento y el 96,6% no utilizó reposición hidroelectrolítica durante el entrenamiento. Se observó que la mayoría presentaba IMC superior a 24,9 kg/m², lo que caracteriza sobrepeso, obesidad grado I y obesidad grado II en la escala de evaluación. La mayor ingesta de líquidos durante el entrenamiento fue de 1 litro y 300 mililitros, siendo la más baja de 850 mililitros. La ingestión contribuyó a la tasa máxima de deshidratación de 1,32%, con un mínimo de 0,22%. También se cuantificó la tasa de producción de sudor, con un valor máximo de 25,2% y mínimo de 8,7%. Estos datos mostraron que la reposición de agua evitó que la pérdida de masa corporal fuera más acentuada.